Luego de pasar por un clima frio que lo único que deseábamos
era estar calientes junto a un acogedor fuego y seguramente aumentamos algunos
kilitos, nada mejor que la llegada del verano para volver a estar en forma. Son muchos los que esperan con ansias la llegada del calor
para disfrutar del sol y la playa, pero muchos creen que no se sienten
preparados para mostrar su cuerpo y lo que el invierno les puede haber dejado.
Si bien se suele decir que es la temporada abierta para
hacer playa, también podemos decir que es la temporada más solicitada para una cirugía estética.
Muchos comienzan rápidamente a realizar rutinas de
ejercicios que, aunque sean muy saludables no brindan resultados rápidamente.
Otra tanta cantidad, buscando un resultado más inmediato para mostrarse en
traje de baño por lo que comienzan a plantearse recurrir a una cirugías estéticas.
Aunque para muchos esto sea una primera alternativa, los
médicos aconsejan primero intentar sobrellevar el aumento de peso que ha
generado la temporada anterior a través de rutinas alimentarias más naturales,
así como practicar deportes.
Si te has planteado lo anterior pero la idea de una cirugía
siguen en tu cabeza entonces seguramente optaras por la más demandada de las
intervenciones, en este caso la liposucción, siendo
esta una cirugía que no conlleva mucho tiempo y no es compleja, además de
realizar justo lo que los pacientes desean, eliminar la grasa de esas zonas que
justamente quieren mostrar.
A pesar de que la temporada en la que nos encontremos es un
factor muy influyente en la decisión de pasar por una liposucción, un consejo que se suele dar es realizar la cirugía en
una temporada anterior, de manera que se pueda ocultar alguna marca que
requiera algún tiempo para desaparecer y también alguna inflamación
posoperatoria.